La prevención y la detección temprana son las mejores armas contra el cáncer colorrectal. COLOSAFE® es una prueba innovadora que analiza ADN en muestras de heces para identificar marcadores asociados a lesiones precancerosas y cáncer en fases iniciales. Su facilidad de uso y alto nivel de precisión la convierten en una herramienta accesible y efectiva para diversos grupos de la población.
- Personas a partir de los 45 años
La mayoría de las guías internacionales de salud recomiendan iniciar el cribado del cáncer colorrectal a partir de los 45 años, incluso sin síntomas ni antecedentes familiares. La incidencia de esta enfermedad aumenta significativamente a partir de esta edad, y COLOSAFE® ofrece una alternativa práctica para comenzar la prevención sin interrumpir la rutina diaria. - Personas con antecedentes familiares
Quienes tienen padres, hermanos o hijos que hayan padecido cáncer colorrectal o pólipos adenomatosos presentan un riesgo mayor. En estos casos, el médico puede recomendar comenzar las pruebas incluso antes de los 45 años, y COLOSAFE® puede formar parte del plan preventivo. - Pacientes con síntomas digestivos inespecíficos
Molestias como cambios en el hábito intestinal, sangrado oculto en heces o dolor abdominal persistente pueden motivar una evaluación médica. Aunque estos síntomas no siempre indican cáncer, COLOSAFE® puede ayudar a descartar riesgos y orientar hacia estudios más específicos como la colonoscopia. - Personas que evitan o posponen la colonoscopia
El temor, la incomodidad o las barreras logísticas hacen que muchas personas posterguen la colonoscopia. COLOSAFE® es una alternativa inicial que permite obtener una evaluación fiable desde casa y, en caso de resultado positivo, acudir al estudio endoscópico de forma dirigida. - Seguimiento post-colonoscopia
En pacientes que ya se realizaron una colonoscopia y requieren control periódico, COLOSAFE® puede servir como herramienta intermedia para monitorear su salud intestinal entre exámenes invasivos.
En resumen, COLOSAFE® no sustituye a la colonoscopia, pero amplía las opciones para que más personas se beneficien de la detección temprana. Consultar con un médico es fundamental para determinar el mejor momento y la frecuencia de la prueba según la edad, los antecedentes y el estado de salud de cada individuo.